Masivas Concentraciones Explosivas de Flores Atacan a la Galaxia Gris, De nuevo
En Cuenca Galería Proceso
http://www.elmercurio.com.ec/399228-arte-de-ana-fernandez-estimula-la-imaginacion.html
http://galeriaproceso.blogspot.com/2013/10/masivas-concentraciones-explosivas-de.html
Me interesan, sobre todo, las grandes preguntas: ¿de que estoy hecha?
¿para que estoy en el mundo? cuál es el propósito de la existencia humana? Pero
lo que aventuro más que respuestas son exploraciones poéticas, momentos de la
imaginación y del maravillarse con el material que me permiten incurrir en ese
lugar con proyecciones de cohete intergaláctico, sus múltiples respuestas
escalonadas: polvo de estrellas, cosmos, universo, galaxias, explosiones
solares, deseo.
Encuentro en el arte la capacidad de buscar respuestas.
Esa habilidad que es compartida sólo con la filosofía o la poesía. Mi búsqueda,
emprendida dentro del dibujo y de la pintura, me ha llevado a indagar en un
cuerpo de trabajo donde exploro la abstracción como un espejo de mundos
extraordinarios: gaseosos, minerales, calientes o gélidos, que albergan
otras vidas inimaginables. Al mismo tiempo esta búsqueda es también
resistencia, desde el arte, ante el peligro de que éste sirva sólo como
ilustración de teorías o se convierta en una postura post
como tantas. Mi práctica
se parece cada vez más al laboratorio del alquimista: corto, pego, pinto,
escribo, experimento, reflexiono: estoy tras lo fantástico, guiada sólo por la
imaginación y el deseo.
Ana Fernández
Agosto 2013
Explosiones solares nos dejan ciegos. 2013. Collage tinta y gouache sobre papel, 190 x 106 cm
Independencia, tu sicodelia enloquece a tus vecinos. 2013. Collage, gouache y tinta sobre papel calado, 106 x190 cm
Libertad, te inclinas y tus flores estallan. 2013. collage, gouache y tinta sobre papel calado,
106 x 190 cm
Explosiones intergalácticas intervienen a nuestro favor. 2012. Collage gouache y tinta sobre papel calado. 190 x106 cm
Células intermedias variantes en explosión. 2012. collage gouache y tinta sobre papel calado,
190 x106 cm
Arena (roca que luego es actitud del agua buena)
Espuma (cresta que cuando llega a ser ya no es ninguna)
Flores Solares del páramo, 2012, collage gouache y tinta sobre papel calado
150 x106 cm
Independencia, tu sicodelia enloquece a tus vecinos. 2013. Collage, gouache y tinta sobre papel calado, 106 x190 cm
Libertad, te inclinas y tus flores estallan. 2013. collage, gouache y tinta sobre papel calado,
106 x 190 cm
Explosiones intergalácticas intervienen a nuestro favor. 2012. Collage gouache y tinta sobre papel calado. 190 x106 cm
Células intermedias variantes en explosión. 2012. collage gouache y tinta sobre papel calado,
190 x106 cm
Arena (roca que luego es actitud del agua buena)
Espuma (cresta que cuando llega a ser ya no es ninguna)
Flores Solares del páramo, 2012, collage gouache y tinta sobre papel calado
150 x106 cm
Una constelación disidente
Fungiendo de animadora e impulsadora de acciones y productos
lúdicos, interactivos, que la insertan dentro de la estética relacional, la performance artística de Ana Fernández (alias
Miranda Texidor) está impulsada por una vocación desmitificadora,
contradictora, irónica; por una energía carnavalizante: reposición y recreación
de juegos de feria, marchas bufas con la apariencia de desfiles cívicos, pastiches
de los estilos visuales y textuales callejeros, apoteosis de lo circense,
celebración paródica del disfraz y de la iconografía pop (los carteles del cine
y del circo), recuperación de las manualidades femeninas (el tejido y el
bordado), creación de una zoología fantástica.
Su reciente propuesta,
humorística e irónicamente bautizada Masivas concentraciones explosivas de flores atacan
a la Galaxia Gris continúa por un lado sus exploraciones plásticas arraigadas
en los dominios del kitsch, y por otro, su guerra sin cuartel contra lo que
llama la “Galaxia Gris”, es decir, las manifestaciones artísticas derivadas de la
ansiedad sociológica y antropológica que Fernández encuentra trilladas,
tediosas y chatas. A este orden frío y muchas veces aséptico –gobernado por los
discursos y teorías en boga– que constituye el mainstreäm del arte nacional y mundial, la artista opone la reivindicación
del oficio, y con él, la vindicación de la forma, del color, de la materia, que
nos devuelven la experiencia física y sensorial del mundo.
Estallido de flores tropicales y psicodélicas –que recuerdan la
estética flower power o los collages de Beatriz Milhazes–, vibrantes
mosaicos tachonados de círculos y cubos –que remiten a los diseños textiles
artesanales–, salpicaduras y chorreos que interrumpen sus apretadas tramas –descarga
seminal, chisguete carnavalero–, guiada por “la imaginación y el deseo” –en sus
palabras– y revisitando los olvidados desvanes del informalismo y de la Action painting, las pinturas últimas de
Ana Fernández trazan una constelación disidente y policroma en la plomiza superficie
del arte ecuatoriano actual.
Cristóbal Zapata
Cuenca, septiembre, 2012.